Nutrición: Comer cada 3 o 4 horas

Nutrición: Comer cada 3 o 4 horas
Nutrición: Comer cada 3 o 4 horas

Hoy te traemos un buen tip para mejorar tu nutrición. No se trata de qué comer, sino de cuándo y con qué regularidad. Lo importante, aún si estás haciendo dieta, es no desfallecer del hambre. De modo que, sin más rodeos, Cómo cuidar tu nutrición Comiendo cada 3 o 4 horas.

Sabemos bien que la clave de cualquier dieta es no morir de hambre. En realidad, eso es exactamente lo que no quieres hacer. Lo que queremos hacer es comer algo cada 3 o 4 horas. La mayoría de la gente come 2 o 3 comidas grandes al día. Ellos siguen sus vidas de a seis, siete, y hasta a veces ocho horas sin comer. Cuando una persona no come durante un largo tiempo su nivel de azúcar en la sangre realmente cae. (Esto también es muy eficaz si usted tiene un gran apetito y sientes hambre a menudo).

Y luego, cuando después de seis o siete horas comes, tienes picos de azúcar en la sangre. Cuando tienes picos de azúcar en la sangre, éstos causan que haya exceso de insulina en la sangre. Cuando hay un exceso de insulina en la sangre en tu cuerpo, éste almacena la grasa con mayor facilidad.

Esto también es por eso que es muy importante desayunar y que sea una prioridad. Porque en el momento en que se despiertas, tu nivel de azúcar en la sangre es bajo. Si esperas hasta la hora del almuerzo es incluso más bajo.

¿Cómo se explica esto en detalle? – Nutrición

Piensa de nuevo en el hombre de las cavernas. En aquel entonces, no había supermercados para conseguir lo que quisieras, cuando lo quisieras. No había bodegas ni almacenes en cada esquina como hay en cualquier ciudad. El hombre de las cavernas no sabía cuándo sería su próxima comida. Él sólo comía cuando tenía la preza y que, literalmente, se comía todo lo que podía hasta que no se podía mover. ¿Por qué? Porque él sabía que no podría volver a comer durante días o incluso semanas.

Esto hizo que nuestro cuerpo sea muy malo en el procesamiento de alimentos. Puesto que nuestros cuerpos no sabían cuando nos íbamos a comer algo, se vieron obligados a revertir su funcionamiento a algo conocido como “modo de supervivencia”.

Cada vez que comes, tu sistema digestivo convierte la mayor parte de los alimentos, especialmente grandes cantidades de carbohidratos en glucosa (azúcar en sangre).

Es un proceso muy complejo, pero básicamente, en cualquier momento que comemos estamos en “modo de supervivencia”.

Debido a esto, nuestro cuerpo convierte la mayor parte de la glucosa (en conjunción con la hormona insulina) en grasa. Por eso la gente que constantemente se está desfalleciendo de hambre puede aumentar de peso, mientras que comen una sola comida al día. A todos nos gustaría acelerar nuestro metabolismo. Por desgracia, a través de miles y miles de años nuestros cuerpos no han cambiado mucho desde los días de los hombres de las cavernas. Cada vez que comemos, nuestro cuerpo ya va automáticamente a convertir lo que comemos en grasa, incluso si es un alimento libre de grasa.

Así que la gran pregunta es: ¿cómo puedo cambiar mi cuerpo de “almacen de grasa” a “quemador de grasa”? La clave para la respuesta se encuentra en una nutrición adecuada.

La respuesta es simplemente esto: Come de 4 a 6 porciones controladas, de comidas equilibradas, cada unas 3 a 4 horas, durante todo tu día.

Al comer de esta manera, pondrás esfuerzo en acelerar tu propio metabolismo. Prueba también beber más agua para acelerar el metabolismo. Piensalo de esta manera: si tienes una ardiente fogata y no le agregas leña al fuego, con el tiempo la hoguera se quemará por completo. Pero si le agregas un poco de madera cada pocas horas, la hoguera seguirá ardiendo. Y te dará más candor.

Así es como nuestro metabolismo se parece al fuego, si nunca o rara vez se alimenta, se ralentizará. Si lo alimentas cada pocas horas, no tiene más remedio que acelerar.

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