Conductas que nos hacen exitosos o fracasados, ganadores o perdedores, populares o ignorados

Conductas que nos hacen exitosos o fracasados, ganadores o perdedores, populares o ignorados

Conductas que nos hacen exitosos o fracasados. Salud y sicología.

 

¿Qué actitudes, conductas o pensamientos nos colocan en una u otra vereda? Desde la niñez, se delinea nuestro carácter y rasgos generales de la personalidad. Algunos estudios aseguran que la carga genética tiene mucho que ver, como también el más primitivo registro de la especie, ya que, como animales sociales, establecemos espontáneamente, las jerarquías en los grupos a los que pertenecemos.

Luego, la crianza nos coloca en un sitio de menor o mayor dominio en la familia: los padres controladores, sobreprotectores, perjudican el normal desarrollo de los mecanismos de supervivencia. Los padres más liberales, generan una sensación de seguridad, a veces excesiva, si el niño tiene un carácter fortalecido puede resultar en una falta de autocontrol; pero en los niños más débiles, se traduce como abandono. Así tenemos niños dominantes, extrovertidos, alegres, que afrontan desafíos y suelen destacarse por su popularidad, y los introvertidos, inseguros, aún los de inteligencia brillante, que no logran encajar y se mantienen a la sombra del grupo.

Estas historias personales, no figuran en un Currículum Vitae, y los pocos casos en los que se realiza un análisis de perfil psicológico, se concentran en aspectos relacionados con el cargo, desempeños anteriores, predisposición al trabajo, etc. Las tendencias psicoemocionales, rara vez son tenidas en cuenta.

Siempre se tiene la opción de comprender y cambiar aquello que nos obstaculiza, nos retrae, o nos confunde, y que fluye desde el interior. Esto es importante porque determinará la forma en que se gestionan los proyectos, el empuje, la perseverancia, la determinación de los objetivos, etc. Las personas se perfilan emocionalmente, según estas tendencias y así definen su manera de actuar socialmente:

 

Perfil del FracasoSon retraídosNo son solidariosLes molesta el éxito ajenoCulpan a los demás por sus fracasosSon susceptibles ante cualquier críticaSon influenciables Les falta voluntad para hacer cambios Simulan tener todo bajo control No pueden organizarse No tienen claras sus metas Generan rumores Creen que todos están contra ellos Se quejan diariamente Critican y juzgan a todos Dicen saber más que los demás No aceptan opiniones ni consejos Son egoístas

Perfil ExitosoSon extrovertidosSon amables y solidariosCelebran los logros ajenosAnalizan las razones de sus erroresAprenden de las opiniones que recibenNo se dejan llevar Se plantean la necesidad de evolucionar No intentan controlar todo Planifican y arman estrategias Tienen metas definidas No se unen a las habladurías Se sienten a gusto en el grupo Disfrutan de las cosas buenas de cada día No juzgan, porque comprenden Su humildad les permite aprender Están abiertos a ideas y opiniones Son solidarios con su entorno

 

Ser personas exitosas o correr en la “rueda de hámster” del fracaso constante, depende de nuestra apertura y aceptación. Nos integramos al  medio, si nos brindamos a él, realizamos nuestras metas, si lo hacemos con alegría y sin tensión. Si quieres que un líquido fluya por un tubo, no debes apretarlo, sino abrir la válvula, para que no haya obstáculos,  la tensión es obstrucción. La apertura da fluidez, todo llega si lo permitimos y confiamos.