Riesgos y verdades sobre la vacunación

Riesgos y verdades sobre la vacunación

Riesgos y verdades sobre la vacunación

Riesgos y verdades sobre la vacunación. Salud y bienestar.

 

Si al cumplir un año de edad, en lugar de enseñarnos a caminar, nos proveen de un par de muletas acordes a la edad, y en lugar de ponernos de pie luego de varios intentos y caídas, simplemente nos sostuviéramos con ellas. Si jamás nos dieran la oportunidad de vencer el desafío del equilibrio, desarrollar los músculos, fortalecer los tendones y ligamentos que nos permiten ponernos de pie, caminar y correr, saltar y bailar, seguramente creceríamos con pequeñas piernas atrofiadas por la falta de uso y siempre  necesitaríamos un apoyo extraño, ajeno a nuestro cuerpo.

Según los últimos estudios sobre inmunidad, lo mismo ocurriría al sistema inmunológico, la vacuna haría las veces de muleta. La consultora de salud KiGGS realizó un estudio encargado por  Salud Nacional Alemana, encuestó a 17000 sujetos y sus familias, niños y adolescentes hasta los 19 años. Por su parte, en Estados Unidos, se entrevistó a 11000, estudio realizado por Bachmair, que puede corroborarse en el sitio web Vaccinelnjury.info. tambien el grupo neozelandés llamado Sociedad de Concientización sobre la Inmunización, realizó encuestas que arrojaron los mismos resultados: los niños vacunados se enfermaron un 52 % más que los no vacunados, estamos refiriéndonos a enfermedades como : asma, gripes, alergias, amigdalitis recurrente, bronquitis crónica, sinusitis, eczemas, infecciones de oído, diabetes, enuresis nocturna, dislexia, migraña, epilepsia, depresión y algunos trastornos motores y del lenguaje.

La Dra. Tetyaba Obukhanych, autora del libro “La ilusión de la vacuna” desarrolla su teoría de que la inmunidad se consigue más por exposición a la enfermedad que por la inoculación de vacunas.

A pesar de estos estudios, no se difundió el tema, debido a la presión de la industria farmacéutica, para la que la vacunación resulta ser un producto de venta constante y creciente, a tal punto que ya se considera que algunas personas sufren de vacunomanía, obsesión por vacunarse.

Por supuesto que algunas enfermedades graves y pandémicas como viruela y poliomielitis fueron erradicadas gracias a la vacunación, sin embargo, muchas otras son más bien causadas por el exceso de vacunación, al no permitir el desarrollo del sistema inmunológico natural.

Vacunarse contra la gripe es en cierto modo, el símbolo de este tema, muchas personas vacunadas, se enferman de gripe igualmente, porque no se atinó a la cepa correcta o en realidad, y cada vez se tienen menos recursos internos para defenderse.

Cada vez que reemplazamos una función natural del organismo, le impedimos el desarrollo de herramientas naturales. El cuerpo cuenta con todo lo necesario para su supervivencia, sino, sería imposible convivir con millones de bacterias, virus y hongos que forman parte de nuestra vida y conviven con nosotros. Incluso, sufrimos de cáncer varias veces en la vida, pero el cuerpo se defiende y deshecha las células correctamente. A veces, el desequilibrio en alimentación, emociones, pensamientos y el acceso constante a medios altamente tóxicos, supera esa capacidad, y la enfermedad aparece. Pero aún entonces, el cuerpo puede recuperar el equilibrio, si colaboramos con él aportándole los nutrientes adecuados, manejando los niveles de estrés y manteniendo una vida emocionalmente armoniosa.

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