Beneficios de la comida picante

Beneficios de la comida picante. Alimentos y salud.

 

En Argentina y en los países sudamericanos, los condimentos picantes no forman parte fundamental de nuestras recetas cotidianas al menos en buena parte del territorio, pues en el noroeste argentino, en la región del Altiplano y países como Perú, la variedad de ajíes hace que las comidas sí incorporen este sabor en forma intensa.

Sin embargo, la gastronomía globalizada está haciendo que nos acostumbremos a sabores más intensos, provenientes de las preparaciones típicas de otras latitudes y la fusión de ellas. La comida picante, además, aporta diversos beneficios para nuestra salud.

El consumo de condimentos picantes como los diversos ajíes y las especias, puede incrementar la actividad de células marrón de grasa en el cuerpo, las cuales son conocidas por quemar energía, lo que significa que tiene un ligero efecto acelerador del metabolismo y contribuye a que perdamos peso. Otro componente principal del ají es capsaicina, la molécula que aporta su característico sabor picante, conocida por incrementar la energía. Los picantes, además, ayudan a suprimir el apetito con lo cual alcanzamos antes la saciedad.

Si nos vamos hacia la gastronomía de la India, donde los picantes son en base a especias y otros ingredientes diferentes, encontramos la curcumina, ingrediente principal en los sabores picantes de esta cocina, que tiene la habilidad de relajar los músculos tensos, y por tanto es ideal para nuestros cuerpos estresados. Al mismo tiempo, tiene la virtud de ser un poderoso antioxidante.

El ají del altiplano y tan presente en la gastronomía mexicana y centroamericana, contiene vitamina C, betacaroteno y potasio, poderosos e indispensables nutrientes que entre muchas virtudes, se han sido asociado con la protección contra el cáncer.

Los picantes son ideales para las recetas de invierno, ya que tienen la capacidad de fortalecer en general nuestro sistema inmunológico. Su ligero efecto irritante permite aliviar la congestión nasal y pulmonar. Y generan cierto calor al consumirlos, por eso es excelente para las frías noches invernales, pues permite que templemos nuestro cuerpo cuando llegamos con frío de la calle.

En general, además del placer de disfrutar de estos personalísimos sabores, la comida picante y especiada es capaz de elevar la producción de endorfinas, hormonas que se asocia con el estado de ánimo que nos aportan un inmediato bienestar – también por acción de la capsaicina.