Muchos de nosotros simplemente no comprendemos la depresión en su totalidad. La gente no entiende muy bien que todavía puede funcionar “normalmente” y tener depresión. Mucha gente piensa que si tienes depresión vas a dejar tu trabajo y así sucesivamente, pero mucha gente sigue trabajando, continúa “funcionando”, pero en un grado muy diferente. No tienes que experimentar sentimientos suicidas para estar deprimido. Sólo puedes estar clínicamente deprimido y pensar, “Esta es la forma en que mi vida es”. Otros acusan que “viven deprimidos”. Es por ello que veremos algunos puntos claves para determinar si nos encontramos realmente deprimidos.
Aunque no hay dos casos que sean exactamente iguales, hay una serie de factores a tener en cuenta.
El insomnio y la fatiga
Muchas personas con depresión sufren molestias en sus patrones de sueño. Algunos se encuentran durmiendo demasiado debido a la fatiga constante, pero la vigilia es más común.
Puede ser difícil ir a dormir, pero por lo general con una depresión más severa es la vigilia la primera que sufre. La gente se despierta entrada la madrugada y no pueden volver a dormir.
Achaques
La depresión puede aumentar tu sensibilidad al dolor. Esto puede presentar dolores tan inexplicables y dolores que no se desaparecen realmente, incluso con tratamiento.
El dolor es un fenómeno casi exclusivamente psicológico. Lo que está pasando en tu vida tendrá un impacto en el nivel de dolor que sientes. El dolor se hace peor o mejor, dependiendo de tu estado psicológico.
Mala memoria
Cuando estás deprimido la memoria se convierte en “demasiado general” y te resulta difícil recordar los detalles.
Imagínate que pierdes tu trabajo y te convertes en una persona con depresión grave y luego alguien te dice: “Necesita conseguir otro trabajo”. Si no estás deprimido, piensas, “debo preparar mi CV, debo preguntar por ahí y ver si hay algo”. Tu memoria te da cosas muy específicas que hacer. Si estás deprimido, estás pensando, “Tengo que conseguir un trabajo… Eee…” No se puede pensar más allá de lo general. Eso perjudica la resolución de problemas.
Indecisión
Cuando estás deprimido es muy probable que tengas lo que los psicólogos llaman “requisito de evidencia elevado”. En otras palabras, quieres estar más seguro antes de tomar decisiones; al mismo tiempo que luchas por confiar en tus instintos.
El uso de tus instintos es algo reservado para un determinado tipo de decisión (aquellas que son importantes para nosotros). Por ejemplo, estás en el aniversario de noviazgo con el hombre de sus sueños y él te pide que te cases con él. Tiene que considerar muchos factores diferentes, pero el nivel superior de la toma de decisiones es la primera impresión. Así que si estás deprimido, las decisiones muy importantes, en particular, van a ser muy difíciles de tomar.
Además, si estás deprimido, simplemente puedes estar menos motivado. Tú “sabes” que todo termina en fracaso, por lo que no tiene sentido realizar el esfuerzo en un primer momento.
Si puedes llegar a reconocer estos síntomas en tu propia persona o en alguien que conoces, es importante que busques la ayuda de un médico de cabecera, un servicio de asesoramiento local o una organización benéfica que trata con personas sufriendo de depresión.
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