En qué radica la importancia de la lectura

En qué radica la importancia de la lectura. Cultura y sociedad.

 

Sin dudas, la lectura es una actividad beneficiosa para el ser humano que, más temprano que tarde, es preciso poner en práctica. Desde muy niños, es preciso que recibamos el estímulo de nuestros padres para llevar adelante esta actividad y de esa manera cultivar el espíritu al tiempo que potenciar nuestras capacidades cognitivas. En el presente artículo, esbozamos un breve repaso por aquellas cuestiones que presentan a la lectura como una actividad beneficiosa para todos nosotros.

Los seres humanos somos los únicos seres vivos que hemos podido desarrollar nuestra capacidad intelectual y por ende, no hacer uso de la misma es un verdadero desperdicio. De esta manera, desarrollar esta actividad desde pequeños y no dejarla de lado cuando grandes nos permitirá hacer uso de una facultad que otros seres vivos no poseen.  Además, es una de las actividades más importantes que podemos llevar adelante con el objetivo de desarrollar en plenitud nuestra capacidad intelectual y de optimizar el uso de los estímulos cognitivos, entre los que se destaca el de la lectura.

El conocimiento como tal, puede potenciarse al mismo tiempo por medio de la lectura y en el proceso educativo, es muy importante. Desde pequeños recibimos estímulos cognitivos entre los cuales la lectura se erige como uno de los más importantes, ya que requiere un compromiso supremo de quienes la practican. La concentración y la reflexión son ambos elementos fundamentales del proceso educativo de las personas y en los cuales la lectura y su desarrollo sostenido juegan un papel fundamental.

Pero no todo es rigor y compromiso y en la vida de las personas hay una cuota de disfrute que también es importante escuchar y poner en práctica. La lectura también comprende esta cuestión y la posibilidad de realizarla con el único objetivo de gozar de ella sin necesidad de aprender conocimientos concretos, también resulta interesante. Sin la necesidad de cumplir con determinado compromiso educativo o laboral, y con el único objetivo de cultivar nuestro espíritu y potenciar nuestro disfrute personal, la lectura se presenta como una alternativa sana,  inmejorable y altamente recomendable para el conjunto de las personas.

Por último, vale decir que la tensión y la lectura jamás van de la mano. En caso de realizarla con objetivos educativos o laborales y mucho más aún con la necesidad y el derecho irrenunciable que todo hombre posee de disfrutar de una actividad en sí misma, es preciso realizarla en un ambiente lo más relajado posible.  Esta posibilidad, la de contar con un ambiente propicio para llevarla adelante, nos brindará herramientas que potenciarán la capacidad para sumergirnos de lleno en aquello que estamos leyendo.