Para lograr llevar un estilo de vida más saludable y lucir un cuerpo esbelto y sano, es necesario tener un plan de acción para poder alcanzar la meta propuesta. Estas son pequeñas recomendaciones que podemos implementar para comenzar a cambiar nuestro estilo de vida:
Avanzar despacio
Si de estar en forma se trata, cuanto más despacio vayamos, más lejos llegaremos. Alcanzar resultados rápidamente puede ser tentador, pero los atajos suelen ser perjudiciales a la larga. Cuanto más rápido tu cuerpo cambie, así sea en pérdida de grasa o incremento de músculo, mayor será el shock que sufra tu sistema, que se hallaba acostumbrado a un estado y un ritmo diferente. Tras este cambio, el cuerpo intentará volver a su estado anterior, el que conocía y sentía cómodo, y lo hará apenas terminemos nuestra dieta de unos meses y volvamos a nuestros antiguos hábitos.
Si realmente queremos cambiar nuestro cuerpo y nuestra forma de vida permanentemente, debemos hacerlo despacio, hacerlo parte de quienes somos, de la misma manera que nos cepillamos los dientes todos los días. Despacio y con constancia es la mejor forma en que podemos transformar nuestros hábitos y cuerpos.
En esta nota te contamos más sobre cómo mantener el compromiso con el ejercicio y la alimentación saludable.
Planificar con detalle
Nuestro plan tiene que ser lo más claro y detallado que sea posible. Seguir una rutina de ejercicios y una dieta a la que no estamos acostumbrados será lo suficientemente difícil, como para además tener que estar preguntándonos todos los días que es lo que sigue. Idealmente, nuestro plan debe detallar instrucciones diarias de ejercicios y posibles comidas. Si no lo tenemos por escrito, sería una buena idea ponerlo en papel, y en un lugar accesible y a la vista. Cuanto más claras sean las instrucciones, mas fácil será seguirlas y evitar la incertidumbre y confusiones.
Constancia: Hacerlo por 30 días
Aproximadamente un mes es lo que lleva, generalmente, construir un nuevo hábito. Si podemos realizar una actividad durante ese tiempo, lo más probable es que nos acostumbremos a ella permanentemente y luego las elecciones correctas y más saludables nazcan de nosotros de manera natural, sin tener que repensarlas una y otra vez. Una buena manera de llevar a cabo este paso es utilizar un calendario donde podamos marcar los días en que hicimos las cosas correctas, así tenemos un registro de nuestro progreso. Esto, por supuesto, nos alentará a seguir adelante y no “olvidarnos” o saltearnos días de nuestro plan.
Más consejos a continuación en la parte 3 de este artículo para iniciar un estilo de vida más saludable y modificar nuestros hábitos positivamente.
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