Microforum: el primer taller de programación infantil (Parte II)

Los talleres de programación infantil han comenzado a ganar terreno en el mercado, y como prueba de ello tenemos el caso de Microforum, nada menos que el primer centro técnico para niños programadores que buscan explorar su talento.

A primera vista uno podría pensar que la programación y la codificación de lenguajes avanzados en un área exclusiva de los profesionales con gran destreza en tecnología. Sin embargo, resulta que niños de seis años en adelante son capaces de manejar un discurso tan complicado como son los códigos que componen la estructura de una serie de aplicaciones dispositivos manipulables y gadgets electrónicos.

Prueba de ello tenemos  los cursos que el famoso centro madrileño Microforum ha dictado el mes pasado para niños de temprana edad escolar.

Hace poco hicimos un repaso en la primera parte de este especial por el tipo de tecnología que se imparten en estas escuelas, así como la enorme influencia del uso de lenguajes de programación en la capacidad desarrolladora y mental de infantes.

Ahora es turno de explorar por otros espacios recreativos como la influencia de los juegos estratégicos para un mejor desempeño intelectual, y los cursos personalizados que se imparten según la edad de cada estudiante.

Microforum: el primer taller de programación infantil (Parte II)

 

#1. La influencia de los juegos en la programación infantil

Contrario a lo que podría suponerse, los juegos de video resultan muy útiles para el correcto desarrollo de las capacidades cognoscitivas de los alumnos, siempre y cuando no se abuse de ello.

Según los testimonios del equipo profesional madrileño, los jovencitos y jovencitas interesadas en el campo de la programación son más eficientes a la hora de organizar sus ideas, retener información y prolongar su periodo de atención y concentración.

Asimismo, el desarrollo de un videojuego estilo Minecraft estimula su creatividad, pues las dificultades no son abandonadas hasta no hallar la forma en la que pueden ser resueltas. Una manera de explicar la amplia predilección por este tipo de juegos, tanto en los alumnos del nivel primario como del nivel superior.

 

#2. Cursos para todas las edades

#2. Cursos para todas las edades
#2. Cursos para todas las edades

En el intento por responder a nuestra pregunta inicial, podemos distinguir dos grupos bien marcados: los mayores y los menores. Si bien ambos tienen como objetivo convertir los conocimientos tecnológicos en una gran aventura, sus metodologías presentan diferencias.

Los más pequeños se focalizan en la creación de videojuegos como las rayuelas, que luego pueden ser utilizadas al aire libre y con el resto de sus compañeros.

Los mayores, por su parte, ponen su interés en el ámbito de la robótica, creando los montajes eléctricos y configurando la programación de sus propios drones, o bien incursionando en el diseño y modelado en 3D para construir pistolas láser. No resulta sorprendente que algunos lleguen a experimentar con Java en este nivel.

 

#3. Otras herramientas de trabajo

#3. Otras herramientas de trabajo
#3. Otras herramientas de trabajo

Los talleres de Microforum no sólo imparten conocimientos en materia de programación, sino que además trabajan con algunos circuitos sencillos, -como MakeyMakey- con la utilización de guantes de goma, plastilinas, papel de aluminio, alfileres, entre otros materiales.

Uno de los juegos más recurrentes es el clásico Memory. Consiste en formar parejas de animales sobre una alfombra de papel de aluminio que incluye una serie de puntos que deben seleccionarse con los pies descalzos. Esto permite el traspaso de electricidad hacia el ordenador para poner en funcionamiento un software fabricado por los alumnos. Se trata de una forma sencilla y entretenida de poner en práctica toda la teoría aprendida frente al monitor.

De esta manera, estos cursos nos enseñan la importancia de desarrollar la inteligencia mediante la creación de nuevas tecnologías sin abandonar la diversión que caracteriza a la niñez. No sería de extrañar que el número de vacantes se multiplique en un futuro cercano.

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