Diseño de bibliotecas innovador en arquitectura

El modo de entender la arquitectura y cómo esta interactúa con el medio que la rodea se encuentra en una irrefutable evolución. Acostumbrados a que en las grandes ciudades arquitectos y diseñadores hagan gala de su creciente creatividad, podemos por fin recorrer nuestra geografía con la certeza de que cualquier rincón puede sorprendernos gratamente.

Ese es el caso de la pequeña localidad de Guadalcázar en Córdoba, donde en pleno corazón de sus calles, emerge el singular edificio de la Biblioteca Antonio Gala, ganador del Premio de Arquitectura Félix Hernández. Una obra que se presenta como una caja compacta de hormigón de 7 metros de altura descompuesta en diferentes cubos en positivo y negativo, albergando en algunas estanterías interiores y en otros, impresionantes ventanas-miradores.

Enfrentada directamente al Ayuntamiento, la biblioteca de Guadalcázar se configura como una caja compacta de hormigón de 7 metros de altura que, recostada sobre la medianera trasera, se vuelca sobre el jardín delantero y el edificio consistorial. Su interior encierra un espacio único subdivido en dos salas superpuestas que, similares en planta, son contrarias en volumen: mientras que la inferior disfruta de una doble altura que le atribuye carácter de gran vestíbulo, la superior, más íntima, comprime su estatura para forzar una vista horizontal del jardín.

Dicha división se conforma mediante un cajón de madera en forma de L que soporta la escalera y oculta las instalaciones que habilitan el confort. En su funcionalidad destaca la supresión del reparto entre espacios servidos y servidores, por lo que ambas plantas se diseñan diáfanas, donde los distintos usos (recepción, lectura, estanterías, pasillos…) se mezclan-liberan en un espacio único y dinámico.

El equipo de arquitectos que realizó este proyecto (Rafael Alcántara, Miguel A. Lázaro, Francisco López y Gudula Rudolf), propuso una distribución interior repartida en dos plantas superpuestas muy diferentes entre sí. Mientras que la parte inferior goza de una doble altura que le da una tremenda sensación de espacialidad, la superior se comprime para forzar la horizontalidad en la vista al jardín. Unidas, conforman un área diáfana diseñada para aprovechar al máximo la funcionalidad de cada rincón.

diseñada para aprovechar al máximo la funcionalidad de cada rincón
diseñada para aprovechar al máximo la funcionalidad de cada rincón

Si volvemos al exterior y esperamos a que caiga la noche, podremos ser testigos de la escenografía de color creada para la ocasión. El diseñador luminotécnico José Benitez, en colaboración con el resto del equipo, dispuso una serie de luminarias lineales empotradas en la estructura de hormigón y paralelas a la línea de fachada con la finalidad de realzar la ya de por sí interesante propuesta arquitectónica.

Una iluminación controlada por software que en un alarde de pura tecnología permite crear escenas de luz progresivas y sorprendentes con las que nuestra experiencia visual es dirigida estética y emocionalmente. ¿Quién dijo que la innovación era sólo cosas de las grandes urbes?

 escenas de luz progresivas y sorprendentes
escenas de luz progresivas y sorprendentes

Sea el primero en comentar

Deje un comentario

Tu dirección de correo no será publicada.


*