Cómo superar la dependencia al teléfono móvil

La tecnología ha logrado en la actualidad acaparar todas y cada una de nuestras esferas cotidianas, situación que en ocasiones se presenta poco feliz. En ese marco, hemos creado un vínculo con determinados dispositivos –tal es el caso del teléfono móvil- que no nos permite separarnos de ellos ni un instante.

En el artículo presente, te vamos a contar cómo hacer para superar tu dependencia al móvil, priorizando su utilización sólo en aquellos momentos en los que reviste –valga la redundancia- determinada utilidad.

 

Cómo superar la dependencia al teléfono móvil

Pues bien, el primer paso que se debe dar a la hora de superar la dependencia al teléfono móvil es sencillamente reconocerla. Si una persona se encuentra hablándote y te muestras más preocupado/a por revisar las notificaciones de tus aplicaciones, estas en presencia de un indicio considerable que te alerta acerca de ello. Revisa esa actitud y de ser necesario, reconoce que la dependencia que tienes para con tu teléfono móvil es exagerada. Ese, como hemos dicho, es un buen y certero primer paso.

Cambiar tu rutina de relaciones es sumamente importante, ya que lo que logran los dispositivos tecnológicos es atentar siempre contra nuestros vínculos cotidianos. Pasa más tiempo con familiares, amigos, pareja, y prioriza que en esos encuentros no intervenga la utilización del dispositivo. Si vas a reunirte, deja el teléfono en silencio y preocúpate por pasar un momento ameno con tus seres queridos. Desde luego que las primeras veces puede resultar difícil de sortear esa ansiedad por revisar notificaciones, pero con el tiempo verás que resulta posible y en consecuencia, lograrás mayor independencia respecto de la utilización del teléfono.

El siguiente paso para lograr independencia es privarte del uso del teléfono en aquellas ocasiones en que no es estrictamente necesario hacerlo. Convengamos que la telefonía móvil se presenta como una herramienta de suma utilidad que con el paso del tiempo ha ido mutando en una utilización superflua más bien orientada a la pérdida de tiempo. Prohíbete a ti mismo utilizar el móvil en aquellas situaciones en que no merece la pena hacerlo y verás como tu dependencia al mismo se diluye en el tiempo.

Por último, cuando veas que ya estás dispuesto a utilizar el teléfono con mesura, intenta pasar un fin de semana desconectado del mismo. Esta recomendación va para aquellas personas que no trabajan el fin de semana y pueden permitirse no utilizar el teléfono durante los dos días que dura el mismo, verán como desconectarse de él les propone un descanso en conexión con ustedes y sus seres queridos.

Sea el primero en comentar

Deje un comentario

Tu dirección de correo no será publicada.


*