En líneas generales y dejando de lado las medias tintas, podemos decir que existen dos formas muy concretas de mirar el mundo: por un lado, hacerlo con ánimo positivo y siempre pensando en cómo mejorar nuestra existencia y por otro, analizar lo que ocurre en la realidad utilizando las gafas del pesimismo. Ser una persona pesimista atenta de manera ineludible contra tus proyectos personales y es por eso que proponemos el siguiente texto; la idea es descubrir si realmente eres un ser pesimista y por supuesto, que si detectas esa falencia puedas corregirla lo antes posible.

 

¿Cómo hacer para descubrir si somos pesimistas?

 

Hay muchas maneras de ver si una persona se presenta como un ser pesimista y lo cierto es que en términos cualitativos esta posición ante la vida no representa beneficio alguno. Por lo general, una persona que ve la vida de esta forma tiende a tener una existencia menos productiva y sumamente alejada de sus seres queridos. Pues bien…¿Cómo descubro si es que soy un ser que ve la vida con negativo pesimismo?

Si crees que todo lo que haces está mal hecho sin duda eres un ser netamente pesimista. En definitiva, las personas que no conciben la posibilidad de hacer bien las cosas son seres que se dedican a no hacer nada y así, dan paso a una existencia sin sentido. ¿Por qué no emprender el camino –arduo pero fructífero- de lograr objetivos personales? Por lo general, los seres pesimistas ni siquiera llegan a realizarse esta pregunta.

Creer o no en la buena suerte puede ser otra sintomatología respecto del pesimismo  que reconocen determinadas personas.  Por lo general, las personas optimistas creen que todo lo que emprendan podrá salirles bien y entonces, también están abiertas a que el azar y la buena fortuna se pongan de su lado. En otra vereda se ubican los seres pesimistas, ellos no conciben la posibilidad de que la suerte juegue de su lado, para ellos siempre la vida tiene guardado lo peor. ¿De qué lado te ubicas tú? Recuerda que si crees en la posibilidad de tener fortuna es por que realmente te has transformado en un ser optimista.

 ¿Tienes miedo a reconocer el sabor del fracaso? Pues bien, eres por excelencia una persona pesimista. Generalmente quienes hablan de la posibilidad de fracasar aducen que no son pesimistas, más bien realistas. Nada de eso es cierto; el miedo al fracaso es un síntoma ineludible de pesimismo. Por lo general, las personas que ven la vida con optimismo ni siquiera se permiten pensar en la posibilidad de un fracaso, se lanzan a una labor –sea cual fuere- y están dispuestos a arriesgar lo necesario sin morir en el intento.

Desde luego que cualquiera de estas situaciones puede ir de la mano a la existencia de una persona pesimista. Si has sentido identificación con alguna de ellas, la recomendación es que pienses de qué manera puedes trocar esa forma de ver la vida para transformarte de una vez y para siempre en un ser optimista.

¿Cómo hacer para descubrir si somos pesimistas?