¿Cómo escribir un guión radiofónico? Presta atención a estos sencillos pasos

Escribir un guión radiofónico no resulta tarea sencilla y lo cierto es que la presente dificultad radica en el doble desafío que la labor presenta: por un lado, deberás pensar en escribir algo susceptible de ser leído con claridad y eficacia y, en segunda instancia, saber que eso que se lee será oído por personas que –valga la redundancia- no podrán leerlo sino más bien oírlo.

¿Qué significa esto? Lo dicho implica reconocer la importancia de que el guión sea lo más claro posible, un radioescucha no tiene la posibilidad que se le concede al lector, aquel ser que puede volver a leer la frase anterior en caso de no haberla entendido. ¿Cómo escribir entonces un guión para radio? Entérate leyendo las líneas que siguen.

¿Cómo escribir un guión radiofónico? Presta atención a estos sencillos pasos

 

1- Deberás escribir como hablas

La naturalidad con la que se escribirá el guión radiofónico será importante y es aquella que te permitirá eficacia en la labor.

Utilizar lenguaje cotidiano no implica caer en la chabacanería, más bien es una invitación a hablar con propiedad y de manera rigurosa, pero priorizando en demasía los intereses del oyente. Si un guión de radio está escrito de manera natural y espontánea, las posibilidades de éxito del programa aumentarán y los oyentes se verán atraídos por la propuesta.

 

2- Las oraciones deben ser cortas

Las oraciones de un guión radiofónico deben ser cortas, de lo contrario el programa no hará mas que “espantar” a la audiencia. Piensa hacia dentro tuyo…¿te quedarías escuchando un programa de radio en que el locutor aburre con elucubraciones que nunca terminan?

No se trata de decir aquí que en un programa de radio el locutor no deberá reflexionar acerca de determinados temas, pero es preciso entender que la rigurosidad con la que se analiza la realidad no se mide en función del largo de una frase. En un guión radiofónico las reflexiones deben ser concretas, precisas, si se quiere seductoras en términos discursivos, pero jamás deberás aburrir por su extensión.

 

3- No utilices palabras que no se entiendan o den lugar a ambigüedades

El vocabulario de un conductor radiofónico suele ser la materia prima de su labor, ahí radica la importancia de formarse en ello. Ocurre que en determinadas oportunidades la persona que habla en radio olvida para quien habla, y  es en esa instancia donde determinados oyentes pierden interés por lo que se dice.

Lejos de menospreciar a la audiencia, es preciso entender que quien escucha un programa de radio puede pretender distenderse, realizar otra labor a la par, informarse acerca de diversas problemáticas, etc. Utilizar un vocabulario riguroso y prolijo resaltará la calidad del producto radiofónico, pero si nos excedemos en ese sentido proponiendo un lenguaje complejo y enmarañado reconoceremos efectos contraproducentes. Evita caer en ambigüedades y lograrás escribir un buen guión radiofónico.

 

4- Resalta en tu guión lo que creas conveniente

Al momento de leer un guión en radio es preciso saber previamente qué cuestiones se pretenden expresar con mayor vehemencia. ¿Cómo hacerlo? Resaltar con color aquellas cosas que creas convenientes te será de mucha utilidad, sobre todo por que te permitirá alzar o disminuir el tono de tu discurso en relación a lo que pretendas decir.
También puedes optar por exponer en el guión otro tipo de anotaciones: ¿dónde hacer una pausa? ¿Cuándo respirar para recuperar aire y seguir hablando? Todo eso y más podrás anotar allí para que tu producto radiofónico gane en términos cualitativos.

La importancia del guión radiofónico radica entonces en que de él –y algunas otras cuestiones anexas- depende la calidad de la propuesta. El guión permite sistematizar todo aquello que ocurrirá en un programa y brinda la posibilidad de planificar con anterioridad la esencia de la exposición. Recuerda que la escritura del guión no representa una labor sencilla y para potenciarla puedes optar por seguir la propuesta presentada aquí.

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