Cómo desarrollar una imagen correcta de negocios. David y Goliat luchando por el marketing

Cómo desarrollar una imagen correcta de negocios. David y Goliat luchando por el marketing

Cómo desarrollar una imagen correcta de negocios. David y Goliat luchando por el marketing

Cómo desarrollar una imagen correcta de negocios. Negocios y finanzas.

Cuando generamos nuestra página web, desarrollamos un producto real o virtual, creamos una campaña de publicidad, o queremos difundir una idea, ¿cómo nos enfocamos en realidad?, ¿a quién nos dirigimos?.

Si la campaña es autista, se trata de un discurso unilateral, en el que se habla de las bondades del objeto de campaña. Se argumenta y se dictamina por qué se debe aceptar o consumir. Pero nunca se tiene en cuenta la forma en que el usuario, o potencial cliente, recibirá la información, ni la interpretación sensitiva del mismo.

La frase: ”el cliente siempre tiene la razón”, nunca fue más cierta que en la actualidad. Las necesidades y el punto de vista del cliente son ley, a la hora de crear una campaña de publicidad, presentar un producto, e incluso, crearlo. Las páginas web corren una desesperada carrera, intentando salir al paso de cuanto nuevo requerimiento tenga la gente. La competencia es feroz, todas las herramientas que nos lleven a ser vistos, al “click” salvador, son bienvenidas. Es impactante el paisaje invisible del espacio virtual. Imagina una larguísima cola de personas, instituciones, empresas y comunidades, esperando ser indexadas, posicionadas, contando los clicks con ansiedad.

Es una imagen extrañamente silenciosa, que el usuario no considera siquiera. Así como el consumidor en el supermercado, no imagina la gran lucha entre marcas, entre pequeños emprendimientos y empresas multinacionales. Simplemente, el cliente, usuario, o consumidor, hace lo suyo: compra, acepta, consume. Es como un dictador ciego, toma lo que necesita, elige lo que mejor va con sus ideas y forma de vida, no es consciente del verdadero rol que está cumpliendo. Esta ignorancia desperdicia un poder increíble. Me arriesgo a decir que hoy nadie tiene más poder que el consumidor. Todo el sistema depende de él, de sus decisiones, que parecen vagas o superficiales, y sin embargo delinean el mapa mundial de la economía e incluso, de la política global.

Por eso es fundamental que tengas una clara idea de lo que el “dictador” requiere, colócate en su camino, recuerda que es ciego. Tu producto, tu página, tu idea debe hacerse visible, por sobre todas las demás. Sé que no es fácil y que competir con ciertos monstruos de grandes capitales, es una tarea inmensa. Pero ya sabes lo que pasó con David y Goliat, ser grande no siempre garantiza el éxito. La inteligencia de los pequeños puede sorprender. Los grandes, alguna vez fueron chicos. ¿cómo llegaron a crecer? ¿Esa es la cuestión?

Tal vez no, tal vez no sea tu intención transformarte en una grandísima corporación. Puede ser que simplemente desees tener éxito en lo tuyo, un éxito manejable, suficiente para sentirte a gusto. David no buscaba ser Goliat, sino vencerlo.

Entonces hay que saber utilizar los recursos que disponemos, que pueden ser pocos, pero si sabemos usarlos, servirán al objetivo. La originalidad e innovación son el punto clave. Si haces lo mismo que los demás, nadie te verá (¿quién distingue una oveja de otra si ambas son blancas?). Algunos cometen el error de copiar la imagen de marketing de las grandes empresas, se disfrazan de Goliat y hacen el ridículo, pues el traje les queda grande.

Si quieres llamar la atención, sé como el mosquito, es muy pequeño, pero su zumbido molesta, hasta el punto de no dejarnos dormir. Desarrolla un perfil de producto, página o empresa, que sea intrigante, que genere curiosidad y que al acceder, el consumidor sienta que se le habla personalmente, que se atiende una necesidad o se resuelve una duda de él, especialmente de él y no de millones de consumidores anónimos. Muchos consumidores rechazan ser masificados y los que no, prefieren las grandes corporaciones, especialistas en consumo masivo, indiscriminado e impersonal.

Por supuesto que tus contenidos, tu servicio y tu producto deben ser satisfactorios para lograr sostener la atención que has logrado, pero recuerda que tu cliente requiere sentirse amablemente guiado hacia tu empresa, tratado afectuosa y eficientemente.

Ah! Olvidaba decirte que también necesitarás suerte, pero eso es lo de menos. Lo importante es que tu mente se enfoque hacia ese día en que te sentirás exitoso.

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