Las peleas dentro de una relación amorosa son una constante. Sin embargo, existen lugares más propicios que otros en donde confrontar los puntos de vista. Échale un vistazo a esta nota y aprende a no cometer errores.
En más de una ocasión hemos experimentado deseos irrefrenables de hacerle saber a nuestro ser amado que se hallaba, por lo menos, equivocado. Si bien esto puede ser una gran relajación para ti, también es posible que expongas a la pareja a una escandalosa escena pública.
Si crees que esta clase de drama no va contigo, aquí te enseñaremos cuáles son los momentos más inadecuados para dejar al descubierto las irregularidades.
Cinco situaciones en las que no deberías tener una pelea de pareja
Los peores momentos para discutir con tu pareja
#1. Cuando se ha bebido mucho alcohol
Si existe una situación realmente patética para tener una pelea de pareja, ésa es cuando una de las partes se encuentra bajo los interesantes efectos del alcohol. La frase popular reza que “todos los borrachos dicen la verdad”, pero ¿hasta qué punto tiene sentido ser sincero/a?
Ninguna persona es perfecta, por lo tanto, es normal que encuentres algunos defectos en tu pareja. Siempre y cuando estos no afecten la relación, no vale la pena que se los hagas saber de un modo en el que luego puedes arrepentirte.
#2. Durante el cumpleaños de un amigo
Así como la energía de dos personas que se atraen fuertemente puede sentirse en el ambiente, el caso contrario no escapa a la percepción de los demás.
Si escoges discutir con tu ser amado durante una fiesta de cumpleaños, resultará imposible que la tensión pase por inadvertida frente al resto de los invitados. Y, a menos que quieras arruinar la fiesta, esto no es aconsejable.
#3. En una boda
Una situación cliché que suele dar lugar a enfrentamientos dentro de la pareja es la boda de un amigo en común. Lo más natural que acostumbra a verse en estos casos es un reproche por la falta de compromiso que no tiende a acabar nada bien.
Si tu intención no es la de presentarte ante el público como una persona caprichosa, lo mejor será que no indagues por qué tu pareja no te ha pedido matrimonio aún. Puedes esperar hasta después de la recepción para hacer este planteo.
#4. Al celebrar el aniversario
Cada cumpleaños es un motivo de celebración. La misma premisa se aplica para el cumpleaños de la pareja, una fecha que debería ser conmemorada con unión y alegría.
Pelear durante un aniversario no sólo es un acto totalmente inoportuno, sino que además pone en evidencia que los dos ya no deberían estar juntos.
#5. En una cena con tus padres
Nuestros padres pueden influir mucho en nuestras decisiones, y si demostramos que no somos felices junto a nuestro objeto de amor es probable que acaben por sugerirnos la separación de la pareja.
Recuerda que tus padres quieren lo mejor para ti, por lo que no les hará ninguna gracia ver que estás teniendo dificultades para sobrellevar tu relación.
Discutir es la manera más sana de llegar a un entendimiento con tu pareja. No obstante, debes hacerlo siempre en el momento y lugar adecuados.
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