Trainspotting: el renacer, lo recomendado en cine

Quizás por la crudeza con que nos revela cada etapa por la que pasa un adicto, sumado al renacer del protagonista principal llamado Mark Renton, es que esta película se convierte en un relato que invita a la transformación y evolución personal.

Pero el director no lleva a cabo esa empresa al mejor estilo de un libro de autoayuda, sino como una plasmación de la realidad de la vida de un adicto y sus sensaciones, sin dejar detalles ocultos. Probablemente esto sea lo que hace de Trainspotting una historia que nos atrapa, identifica y resuelve nuestro lado oscuro.

El relato transcurre en Edinburgo y nos cuenta la historia de un grupo de jóvenes adictos a la heroína, que era asimismo, la historia de un sector de la sociedad escocesa.

Podemos ver la intervención del gobierno a través de los organismos de salud pública y los judiciales, un sistema preparado para colaborar en la recuperación de aquellos ciudadanos atrapados por el consumo de drogas duras.
Este grupo de amigos comparten el tiempo en una casa abandonada, donde dan rienda suelta a su adicción y ven pasar su vida como en un sueño. Por momentos, conflictos, la muerte y la vida misma los despierta como un rayo que los hace reaccionar y los encuentra en situaciones dignas de una pesadilla. Aún así, siguen como por inercia en ese mundo que los atrapa y los consuela.

También se muestra como la adicción genera vínculos enfermos y dependientes, donde todos se incitan a continuar en post de la adicción y sí algún integrante del grupo intenta otro camino, la presión por parte de los otros se ejerce. Se ve el egoísmo, los intereses propios y qué se elije al momento de estar frente a una encrucijada.

Aún así Mark logra abrirse paso en otro sentido y finalmente, el protagonista logra encontrar las endorfinas y la motivación, en la simpleza de la vida cotidiana, con su rutina y desafíos diarios.

Finalmente, Mark decide optar por sí mismo, y aunque en el discurso él lo llama traición a sus amigos, se podría considerar que el camino que elige es el de la vida, el de la libertad de cualquier adicción peligrosa, para lo que es necesario alejarse de todo.

Fascinante la escena que acompaña Lou Reed con su famoso Perfect Day, donde se expresa como en ninguna otra lo que significa el sumirse en un universo que aliviana todos los conflictos y contradicciones de una persona. Y luego, el despertar, esa bocanada de aire que procura la adrenalina y que trae brusca pero necesariamente, al protagonista de vuelta a la vida.

Otra de las escenas impactantes es en la que se ve a Mark en su cuarto, sumido en alucinaciones y con el cuerpo entero pidiéndole más de lo que lo alimentaba hasta entonces. Refleja a la perfección la desesperación, dureza y dificultad del proceso de abstinencia por el que pasa un adicto.

Trainspotting fue dirigida por Danny Boyle y el relato se basó en la novela homónima del escritor Irvine Welsh publicada en el año 1993. En el rol principal vemos a un joven Ewan McGregor, que disfrutamos posteriormente en películas como La Isla, Te Amo Phillip Morris, Moulin Rouge y muchos otros títulos más.

Aunque tiene sus años, Trainspotting es el filme recomendado para aquellos que desean comprender el mundo de un adicto o quienes están intentando la vida de una manera nueva y más positiva.

Sea el primero en comentar

Deje un comentario

Tu dirección de correo no será publicada.


*