¿Por qué hacer un curso de PNL? Básicamente porque la comunicación hoy es un elemento fundamental en la vida cotidiana. La Programación Neurolingüística es el estudio de nuestros patrones mentales, de los procesos que utilizamos diariamente para codificar información, es decir para comunicarnos.
Muchas veces a lo largo de nuestra vida, sentimos la necesidad de modificar alguna conducta o hábito que sentimos obstaculiza el logro de nuestros objetivos. Para lograr una buena comunicación no sólo basta la calidad del mensaje, sino también la manera en que se lo transmite. Esto es fundamental para lograr la comprensión y la efectividad de dicho mensaje.
Como se puede suponer el curso de PNL está dirigido a todas las personas, estudiantes, docentes, profesionales en general; todos pueden beneficiarse y mejorar su comunicación cotidiana a través de esta formación.
Accediendo ya a los elementos básicos de la programación neurolingüística, es decir la posibilidad de cambiar los propios pensamientos, se pueden lograr cambios a nivel personal y también en relación a los demás. Los seres humanos tenemos hábitos de pensamiento disfuncionales que nos causan displacer y empeoran nuestra calidad de vida. Una computadora no puede cambiar su programa, solo ejecutarlo. Las personas pueden cambiar sus programas de pensamiento.
La programación neurolingüística trata de programar nuestros sentidos, nuestro cerebro, y nuestra comunicación, para alcanzar el máximo potencial y aplicarlo también con los demás.
Algunos de los objetivos de la PNL son:
- Mejorar la forma de relacionarse con otras personas
- Poder comunicarse y expresarse mejor (tanto en la relación uno a uno como en público)
- Saber influir sobre los demás
- Poder adaptarse a los cambios y situaciones que se nos presentan a diario
- Conocerse mejor a uno mismo y a los demás.
Entre los temas más relevantes del curso, se encuentran: la comunicación no verbal, las distintas modalidades y su aplicación en diferentes ámbitos, la comunicación verbal, negociación y comunicación, argumentación, manejo de emociones, entre otras.
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