Por qué estudiar marketing

Por qué estudiar marketing. Educación y formación.

 

Si investigamos un poco la demanda laboral que hay por estos días, comprobaremos que unas de las profesiones más requeridas son aquellas que están relacionadas con el marketing. El desempeño puede ser como consultor, asesor o bien en relación de dependencia dentro de una empresa. Pero, ¿qué es específicamente lo que hace un egresado de la carrera?

En pocas palabras quien estudie marketing estará preparado para determinar el posicionamiento de productos y servicios, analizar y establecer políticas de precios adecuadas, investigar y especificar segmentos de mercados, diseñar canales de distribución y estrategias de comunicación, desarrollar planes de marketing que se adecúen a las condiciones, y  muchas otras funciones.

A su vez existen diferentes niveles dentro de la carrera: licenciatura, tecnicatura o curso y también diversas orientaciones como por ejemplo: administración, negocios internacionales, contabilidad, recursos humanos y finanzas. En estos últimos años se está dando una tendencia creciente en este campo de estudio, se están desarrollando especializaciones de marketing en diversas áreas como por ejemplo el marketing digital o el marketing gastronómico. A través de ellas los principales ejes de la carrera se aplican a ámbitos específicos, teniendo en cuenta sus particularidades.

El marketing, contrariamente a lo que muchas personas piensan, es una profesión que demanda una fuerte dosis de creatividad, análisis, iniciativa, además de una gran habilidad para trabajar en equipo. Es decir, no solamente se ocupará de leer métricas y números sino también  de imaginar y diseñar estrategias para alcanzar objetivos de una empresa.

Por otro lado el profesional del marketing deberá interrelacionarse con las otras áreas de una empresa como por ejemplo: el departamento de comunicaciones, el área de publicidad, administración, es decir trabajar en conjunto permanentemente.

¿Qué condiciones deberá tener quien estudie esta carrera?

Deberá ser una persona creativa, flexible, que pueda trabajar en equipo, con capacidad de análisis y negociación, con facilidad para comunicarse y comunicar ideas. También deberá ser una persona proactiva con pensamiento crítico y positivo para poder anticiparse a las tendencias comerciales y sociales de todas las épocas, y de esa manera diseñar estrategias adecuadas para sus clientes.