Por qué estudiar instructor de pilates

Este método creado por Joseph  Pilates ha cobrado un creciente número de adeptos en estos últimos tiempos. Su creador desarrolló este método también conocido como “Contrology”: la ciencia y el arte del desarrollo coordinado de la mente, el cuerpo y el espíritu, a través de movimientos naturales bajo el estricto control de la voluntad.

El método pilates combina diferentes capacidades físicas: elasticidad, elongación, resistencia muscular sumadas al trabajo de respiración profunda y centramiento postural. Todo ello hace que pilates sea muy aconsejable para flexibilizar, elongar, tonificar, corregir y rehabilitar para personas de  todas las edades y condiciones físicas.

Pilates es un método personalizado que posee variantes como  ejercicios en el suelo y con equipos: reformer, trapecio, chair, unidad de pared, barrel, etc. Realizar el instructorado nos capacita en todas esas modalidades, además de brindarnos los principios básicos de esta técnica,  consejos para una práctica consciente y responsable y demás conocimientos imprescindibles para ejercer esta disciplina.

Profesionalizarse en esta práctica requiere una importante responsabilidad y gran disciplina, como toda actividad que  implique trabajo físico. Durante la carrera se aprenden también temas relacionados con la anatomía del cuerpo humano, ya que se deben conocer los músculos y las articulaciones que se trabajan en cada ejercicio.

La carrera por lo general se divide en  tres niveles, de un año de duración cada uno. Sin embargo la capacitación debe continuar más allá de la carrera en sí porque  las técnicas van cambiando permanentemente, incorporándose nuevas aplicaciones como por ejemplo pilates para niños o para embarazadas.

Tiene una gran salida laboral, ya que en este momento está en pleno auge. Se puede ejercer tanto en gimnasios como también dar clases particulares o en centros de rehabilitación, ayudando a las personas a alcanzar sus objetivos físicos y mentales. Quien quiera estudiar esta carrera deberá poseer vocación de servicio y capacidad para las relaciones interpersonales, como así también disposición para las actividades que impliquen la armonización del cuerpo, la mente y el espíritu.

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