Posturas de Yoga para la columna: Torsión ó Matsyendrasana

postura de yoga para la espalda

Torsión ó Matsyendrasana

  • Beneficios

Para poder favorecer la elasticidad en la columna las posturas de torsión son muy buenas.  Tonifica los nervios y músculos de la espalda. Favorece los ligamentos de las vertebras. Tonifica músculos del cuello. Favorece al buen funcionamiento de Riñones, hígado y bazo.

Ayuda a fortalecer al músculo Deltoides, se sitúa articulación del hombro, cualquier movimiento que ofrecemos con el brazo este músculo interviene en la fuerza, en el lanzamiento y empujes.

Previene el lumbago, la constipación y reumatismo. Revitaliza glúteos y músculos de las piernas.

  • Contraindicado

Hernia de disco. Problemas graves en la columna vertebral.

  • Realización de la postura
  1. Sentados piernas estiradas, columna recta, brazos al lado del cuerpo.
  2. Flexionar pierna derecha y cruzar sobre rodilla izquierda, pegándola firmemente al suelo. Inclinamos hacia adelante el tronco y llevamos el brazo derecho por delante de la rodilla derecha. Giramos mano y brazo, tomamos la rodilla de pierna extendida.
  3. Brazo izquierdo, rodea la cintura por atrás en la espalda palma abierta y hacia afuera, debe descansar sobre el hueso de la cadera derecha.
  4. Inhalar y al exhalar giramos el tronco hacia la izquierda, lentamente.
  5. Mentón levantado, cabeza derecha y columna recta.
  6. Repetir lado contario.

Esta postura, la lograremos poniendo imaginación, ya  que miramos al frente erguidos y afianzados en el presente, en la torsión miramos el pasado, nos quedamos así observando sin analizar, sólo observar  y dejar todo en ese lugar, en el pasado, cuando retornamos al frente muy despacio , vemos como la vida nos regala el aquí y ahora, cuando inspiramos tomamos fuerza para poder ver que nuestra vida tomará un giro importante,  al exhalar eliminamos de nuestra mente, la angustia, tristeza o algún pensamiento que no nos deja disfrutar de éste momento.

Tomen ésta recomendación, cada vez que practican posturas de Yoga, no sólo movemos nuestro cuerpo, sino que si tratamos de concentrarnos interiormente para esa unión, que significan las palabras, cuerpo, mente y espíritu.

No hagamos solamente un ásana para lo físico, hagamos una integración para poder curar dolencias del alma.

Nada se logra mágicamente, sólo con empeño, paciencia y perseverancia, veremos cuantos cambios se producen en nuestro carácter, en nuestra postura  ante el mundo.

Veremos cómo se produce una alquimia, asomándose la luz para poder salir de esos pensamientos de no creer en lo que podemos lograr.

Se producirá un cambio tan rotundo, que notaremos, buen humor. Repararemos en las pequeñas cosas, observaremos la naturaleza, quizás nunca nos habíamos detenido en mirar la luna, la nubes, el horizonte, la contemplación de una flor ó la luz de una vela. Aprenderemos la humildad, el dar y recibir, por sobre todo combatiremos al Ego.

Ésta última palabra nos convierte en personas orgullosas, egoístas, competitivos.  Nos hace personas con etiquetas, aparentar  algo que no somos. Nos hace ser esquivos del espíritu, nos separa del “Ser”.

“Así como hay dos polos en un imán, uno positivo y uno negativo; las personas también cargamos con dos personajes en disputa; uno de ellos es el que se afana por el éxito material y el otro que aspira a elevarse espiritualmente.”

Esto quiere decir que siempre será una lucha hasta que podamos encontrar la Paz y liberemos la ansiedad. Sólo ahí encontraremos nuestro “Ser”.

Con amor y armonía, les deseo que puedan encontrar el sendero.

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