Drogas auditivas: la nueva moda social de los jóvenes 2.0 (Parte I)

¿Alguna vez te has preguntado cómo sería el sonido de la marihuana? ¿Será acaso posible reproducir en una pista de audio los efectos que produce una sustancia tóxica? Todas estas preguntas parecen haber hallado una respuesta contundente con el consumo de drogas virtuales. Una vez más, las plataformas online se convierten en protagonistas de una tendencia viral que sobrepasa toda experiencia alucinante.

Por más descabellado que resulte, cada vez son más los jóvenes deseosos de experimentar nuevas sensaciones de éxtasis frenético y desquiciado. En ese sentido, Internet es la mejor alternativa para hallar todo tipo de contenidos bizarros y curiosos. Y es que bajo los efectos del ciberespacio todo es posible. Bueno, casi todo.

A esta fantástica odisea online se le ha sumado la práctica de una nueva actividad que responde al estilo de vida propio de la generación Z, aquella que nació cuando las nuevas tecnologías ya existían en el mundo, es decir, aquellos que desde pequeños ya manejaban un ordenador y se comunicaban por mensaje de texto.

Esta generación es la que notoriamente acapara buena parte de los sectores virtuales, moviéndose con tanta facilidad e interacción por los distintos formatos de comunicación: smartphones, tablets, teléfonos inteligentes, entre otros.

 

El poder de la motivación auditiva

 

Atrás quedó la adicción de las redes sociales; el nivel de entretenimiento que provocan los “memes” de Facebook no se compara al uso de nuevos recursos tecnológicos para experimentar una mezcla de sustancias alucinógenas que suscitan sensaciones intensas a partir de la percepción de los sentidos.

La música siempre ha sido motivo de inspiración y compañía para disfrutar de emociones surrealistas que muchas veces escapan de nuestra capacidad de entendimiento. Sin embargo, ni siquiera el consumo comercial de la música banal y vacía de estos tiempos ha logrado los resultados que provoca el consumo de drogas auditivas.

Basta con hacer una simple búsqueda por la red para descubrir toda una poderosa industria que impulsa la práctica y venta de drogas auditivas. En Youtube, por ejemplo, podemos reproducir videos de jóvenes experimentando los efectos de la droga auditiva y compartiendo su reacción ante miles de personas.

 

Los orígenes de las drogas auditivas

 

Los orígenes de las drogas auditivas

Pero la existencia de las drogas auditivas no es ninguna novedad. En 1839, Heinrich Wilhelm Dove, un físico y meteorólogo prusiano descubrió el efecto que producen las drogas virtuales.

Para entender el paradigma y la capacidad de influencia de la estimulación auditiva ponemos el siguiente ejemplo: si nuestro oído izquierdo percibe sonidos de 400Hz y el oído derecho de 410Hz, el pulso binaural resultante (sonidos percibidos por el cerebro), será de 10 Hz. Es así como surge un contacto en las ondas cerebrales, las cuales llegan a una zona que se le denomina mesolímbica.

Esta vía controla todas las emociones y estados de ánimo que sentimos frente a estímulos perceptivos. En pocas palabras, los sonidos que percibimos pueden generar una respuesta agradable y placentera dependiendo del nivel de estimulación.

El consumo de las drogas auditivas se viene expandiendo con enorme peligro entre los jóvenes y adolescentes de todas las edades. Lo que comienza como un juego sutil podría convertirse en un peligro para la salud mental.

 

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