De a poco comienza a asomar el frío y empezamos a sacar la ropa más abrigada, como así también las frazadas y acolchados que durmieron en el placar durante todo el verano. Si tienes deseos de renovar tus habitaciones y prepararte de a poco para la época invernal, te propongo que inviertas parte de tu tiempo en realizar unos prácticos acolchados.
¿Cómo lo haremos?, de una manera muy sencilla y sin realizar gastos, ya que vamos a reutilizar prendas que ya hemos dejado de usar y están guardadas. Vamos a brindarle la utilidad perdida a todo tipo de ropa que tengamos en desuso.
¿Qué necesitamos?
- Ropa
- Retazos de tela
- Aguja para coser a mano
- Hilo, preferentemente de nylon.
- Tijera
- Tiza para tela o lápiz negro.
Una vez que hayamos seleccionado la ropa y los retazos de tela para armar el acolchado, debemos proceder a lavarlos, luego de esto vamos a descoser la ropa y plancharla.
Después, procederemos a marcar sobre la tela rectángulos o cuadrados, pueden tener el mismo tamaño o variar, esto dependerá del estilo que busquemos imprimirle. Una buena medida es la de 18 x 18 centímetros, tengan en cuenta que resultarían cuadrados de 15 x 15 centímetros al descontarle los 3 centímetros aproximados que se esconden con la costura.
Una vez marcadas las figuras, debemos proceder a cortarlas. Ya teniendo en mano todos los cortes, vamos a comenzar a unirlos y así formar nuestro acolchado. Para esto debemos utilizar, preferentemente, un hilo de nylon, ya que este tiene mayor resistencia.
Uniremos del lado del revés cada corte por los distintos lados, así iremos armando un rectángulo grande. La medida dependerá de la cama en que lo colocaremos, sea esta de una plaza o dos, como también, de el largo que queremos darle, según cuanto queremos cubrir. Sacar la medida es sencillo, sólo debemos medirlo sobre la cama en la que lo colocaremos.
Cuando tengamos la medida justa, procederemos a armar el otro lado del acolchado. Para esto podemos utilizar la misma técnica, y para darle un toque distinto podemos recortar una figura que difiera, aunque sea mínimamente, de la del primer lado que hicimos, por ejemplo, cortar rectángulos y disponerlos de manera diagonal, esto le dará un diseño que dará la impresión de dinamismo.
Asimismo, podemos recortar hexágonos, si combinamos bien los colores, darán la impresión de ser pétalos de pelotas de fútbol, esto puede ser ideal para vestir la cama de los niños. Recuerden que ustedes pueden darle el estilo que deseen, adecuándolo para vestir las distintas camas, según la edad e intereses del dueño de la misma.
Una vez terminado un lado, podemos, por ejemplo, diseñar un dibujo o el nombre de la persona a quien vaya a pertenecer con tela y agregárselo, a la mejor manera de aplique. Si sabemos algo de bordado podemos bordarle un nombre, y así miles de opciones que seguramente irán saliendo a la luz a medida que realizamos esta tarea manual.
Luego de unir mediante costura el segundo lado, sólo quedará unir los dos lados entre sí, podemos hacerlo desde el lado interno, y antes de cerrar uno de los lados de menor extensión, deberíamos dar vuelta el acolchado y cerrar el último lado lo más prolijamente posible, si queda alguna imperfección, podemos cubrirla con una puntilla o tejido al crochet.
La misma idea se puede tomar para realizar alfombras para las piezas, almohadones, caminos para la mesa, manteles, en fin, es un recurso muy prolífero que nos ayudará a ahorrar dinero y reutilizar todo aquello que ya no se usa.
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