Formas de detectar mentiras: el lenguaje no verbal

Aseguran expertos que una gran parte de nuestra comunicación se da en lo que se llama el lenguaje no verbal: son pequeños gestos, muecas, rictus, hasta la postura corporal, que tienen la particularidad de ser inconcientes en la mayoría de los casos, y por ello, se trata de un tipo de mensajes mucho más sincero y directo. Conocer algunos fundamentos del lenguaje no verbal permite – entre otras cosas – detectar cuando alguien nos miente.

Los estudiosos de la comunicación no verbal han identificado hasta el momento al menos 78 gestos que indican que un discurso es falso.
Uno de los más conocidos y contundentes, es el gesto de tocarse la nariz. Es que al mentir, por un mecanismo no del todo claro, es habitual sentir picazón en la nariz, que hacen que el impulso de rascarse sea irrefrenable. Incluso, se le ha dado el nombre de “efecto Pinocho” a esta particularidad.

Otro dato a considerar es que cuando se dice una mentira, el cerebro ordena que suprimamos las palabras falsas. Es por ello que muchas personas se tapan la boca sin ser muy concientes de ello, es un resabio de un gesto infantil de taparse la boca al decir algo indebido.
Por la misma tensión que provoca decir una mentira, es que cuesta sostener el contacto visual si lo que se sostiene es falso, las personas evitarán mirar directamente a los ojos del interlocutor si no están diciendo la verdad. Otra forma de evitar el contacto visual es tocarse los ojos, para precisamente evitar la mirada.

Otro tip para evaluar la veracidad del interlocutor, es que si cree que ha logrado mentir con éxito, puede mostrar una sonrisa de medio lado. Es un gesto triunfante del que ha elaborado una farsa y cree no haber sido descubierto.

Una forma bastante certera de detectar una mentira es cuando el interlocutor repite la pregunta. Está ganando tiempo para elaborar una respuesta. Si tiene una respuesta real, no tardará en decirla. De la misma forma, las estrategias de elusión de la respuesta, van por la misma vía. Cuando una persona miente, las pausas entre cada palabra aumentan unas décimas de segundo. También puede darse que el interlocutor incluya la pregunta en la respuesta, en un esfuerzo por sonar convincente.

Como decíamos, existen muchos gestos de lenguaje no verbal que delatan a un mentiroso, estos son apenas los más comunes. Sin dudas, esta disciplina resulta sumamente interesante.

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