Cómo tomar decisiones informadas sobre tus alimentos

Con toda esa charla en los medios por estos días hablando acerca de “Alimentos Procesados”, “MSG Agregado”, “Alimentos Orgánicos”, los “alimentos modificados genéticamente” y más, muchos de nosotros seguimos ciegamente lo que nos dicen sin tener tiempo para entender qué tiene que ver con nuestro cuerpo y mente.

Aparte de la comprensión de los alimentos, también hemos añadido una complejidad adicional en nuestras vidas de dietas varias para diferentes razones por las que podrían ser beneficiosas o perjudiciales para nosostros. Yo simplemente no soy capaz de hacer un seguimiento de todos los consejos dietarios que están flotando alrededor.

Gran parte de la información nutricional, yo diría la desinformación acerca de la nutrición en ambas etiquetas y los grandes medios de comunicación en la sociedad, sin duda ha superado un montón de gente. La población general a menudo se aferra a las ideas y las modas, porque una gran celebridad aprobó algo, en lugar de volver a lo básico y apegarse a las cosas que son simples.

Tomemos, por ejemplo, el glutamato; toda la discusión que se ha generado alrededor en una sola sustancia más común y natural que estamos consumiendo casi todos los días. ¿Sabías que el cuerpo humano utiliza un mecanismo complejo para la conversión de los alimentos que comemos en compuestos más simples que nos proporcionan la nutrición?

Las proteínas que ingerimos se descomponen en aminoácidos. El ácido glutámico es uno de tales aminoácidos, derivados de proteínas. De hecho, la glutamina es el más abundante aminoácido presente en el cuerpo. El glutamato monosódico (MSG) es en otro lado la sal de sodio del ácido glutámico libre y proporciona una función de sabor que se produce naturalmente en los alimentos.

Es por ello que hemos encontrado muchas cosas interesantes que no sabíamos. Como que el glutamato libre también se encuentra en algunos de los alimentos que comemos todos los días como el queso, champiñones, leche, tomates, y pollo, entre otros.

Lo siguiente también puede contener sabores naturales o condimentos: la carne de vaca natural o aroma de pollo, hidrolizado de proteína de leche o vegetal, proteína texturizada, condimentos, salsa de soja, el caldo, etc.

Los siguientes son los alimentos que contienen glutamato: queso, queso parmesano, salsa de soja, nueces, jugo de tomate fresco, jugo de uva, guisantes, champiñones, brócoli, tomates, setas, ostras, maíz, patatas, pollo, la caballa, la carne de vaca, huevos , la leche humana. (Fuente: The Guardian)

Así que, ¿el MSG es realmente malo para nuestro cuerpo? Esas son las opciones que hacemos cada uno, individualmente. Cuando te das cuenta de que cosas como el glutamato también son sustancias naturales entonces has hecho una elección informada.

Así como pasa con el glutamato, hay muchas cosas que consumimos y de las que no somos conscientes.

Así que ¿en qué necesitamos tomar conciencia y cómo podemos tomar decisiones correctas y más informadas?

Cómo tomar decisiones informadas sobre tus alimentos

 

#1 Comer Fresco y Local

La forma más fácil de mantenerse en un buen camino y mantener las cosas simples es comer productos locales y comer alimentos fresco. Trata en lo posible de conseguir productos de temporada, los productos fabricados en el país y la zona y que ayuden al ecosistema local.

Hay un montón de recetas en internet. Planifica tu menú semanal y empieza a cocinar.

 

#2 Comprender lo que tu cuerpo necesita

Lo que necesitas para tu cuerpo y tu mente no se puede determinar por las modas o las dietas. Muchas veces nuestro cuerpo pasa por cambios a medida que avanzamos en edad. Cada pocos años nuestras necesidades corporales cambian debido a diversos estilos de vida y factores hormonales.

Si eres personalmente incapaz de averiguar lo que tu cuerpo necesita, una buena manera es consultar con un nutricionista que también cuenta con un experto de aptitud. Personalmente sentimos que la comida es sólo una parte de lo que significa mantenerse sano y en forma, hacer ejercicio y un cambio de estilo de vida es lo que hace la diferencia holística.

 

#3 Conocer hechos sobre alimentos

Por mucho que me gustaría hacer hincapié en que debes comer sólo local y fresco, hay momentos en los que tenemos que recoger productos fuera de ese espectro. Y aquí es donde tu conocimiento y comprensión sobre los alimentos envasados ayuda. Y esto a veces no es claro; por lo tanto, tomar tus decisiones de alimentación y nutrición adecuadas es una parte necesaria de trabajar hacia un estilo de vida saludable.

Leer la Etiqueta de Nutrición detrás del paquete de alimentos ayuda a determinar lo que hay en el paquete y en qué cantidades. La información más importante que tienes a la hora de hacer una opción saludable es averiguar la cantidad de grasa total y grasa saturada que la comida tiene. Esto es importante porque las grasas pueden contribuir a un aumento en tu “colesterol malo”.

 

#4 Tomar decisiones informadas

La comprensión de lo que el cuerpo necesita en términos de nutrición, tu estado físico y la dieta están todos en sus manos. En estas épocas en la que nos falta tiempo para pensar durante más de una fracción de segundo, podríamos usar algo de este tiempo para investigar por internet. De hecho, podemos aprovechar la información en el mundo de la web para obtener información en nuestras manos acerca de la comida, dietas y modas que existen.

Vivir una vida saludable y en forma no puede ser más fácil en el mundo actual. Tenemos acceso a nutricionistas de calidad, expertos de fitness, gimnasios, productos locales y frescos entregados a nuestras puertas, internet lleno de recetas para cocinar saludable, y alimentos envasados para hacernos la vida más fácil.

En todos ellos, todo lo que se requiere es mantener un equilibrio y ese equilibrio depende de ti. Para mantener el equilibrio adecuado debes conocer tu cuerpo y tu mente.

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