Cómo se eliminan los tatuajes con Láser

¿Tienes un tatuaje, pero ya no luce tan bien como lo hacía al principio? Quizás estás considerando un tratamiento de eliminación de tatuajes con láser. Existen muchas dudas respecto a los procedimiento y las posibles consecuencias de los mismos, como cicatrices, dolor o manchas. Es por ello que aquí vamos a intentar aclararte esas dudas y algo más.

Para aquellos que tienen un “diseño corporal no deseado”, las técnicas de eliminación de tatuajes con láser más nuevas pueden eliminar tu tatuaje con efectos secundarios mínimos. He aquí cómo funciona: el láser elimina el tatuaje mediante la ruptura de los pigmentos de la tinta del tatuaje con un haz de luz de alta intensidad.

El pigmento del tatuaje negro absorbe todas las longitudes de onda de láser, por lo que es el más fácil de tratar -a diferencia de lo que se cree-. Otros colores sólo pueden ser tratados por láseres seleccionados basados en el color del pigmento. De modo que si te has tatuado un tribal en negro, estás de suerte, podrás removerlo tan fácil como cuando fue tatuado.

 

Eliminación individualizada

Debido a que cada tatuaje es único, las técnicas de eliminación deben ser adaptadas a cada caso individual. En el pasado, los tatuajes podrían ser eliminados por una amplia variedad de métodos, pero, en muchos casos, las cicatrices eran más desagradables que el propio tatuaje.

Los pacientes con tatuajes tratados previamente también pueden ser candidatos para la terapia con láser. Tatuajes que no han sido eliminados eficazmente por otros tratamientos o con remedios caseros pueden responder bien a la terapia con láser que, a diferencia de los tratamientos anteriores, no da lugar a una cicatrización excesiva.

 

Encuentra un especialista de confianza

Para eliminar un tatuaje, debes asegurarte de encontrar un dermatólogo de confianza o centro de cirugía estética para asegurar el tratamiento y la atención adecuada. Si es posible, debes obtener una recomendación de tu médico generalista de cabecera para que te derive a un centro de cirugía o dermatológico que se especialize en la eliminación de tatuajes.

 

¿Qué puedo esperar durante la eliminación de tatuajes con láser?

Dependiendo del tamaño y el color de tu tatuaje, el número de tratamientos varía. Tu tatuaje puede ser eliminado de dos a cuatro visitas, aunque puede tardar un máximo de 10 sesiones más en el peor de los casos. Tendrás que programar una consulta tú mismo, en el tiempo durante el cual un profesional capacitado evaluará tu situación personal y te aconsejará sobre el proceso.

 

El tratamiento, paso a paso

El tratamiento con láser varía de paciente a paciente dependiendo de la edad, tamaño y tipo de tatuaje (amateur o profesional). El color de la piel del paciente, así como la profundidad a la que el pigmento del tatuaje se extiende. Todo esto también puede afectar a la técnica de eliminación.

En general, esto es lo que sucederá durante una visita al consultorio para la eliminación de tatuajes utilizando los láseres más nuevos, paso a paso:

1. Primero debes colocarte protectores oculares. La reacción de la piel al láser se prueba para determinar la energía más eficaz para el tratamiento. Pasada esta etapa, comienza el tratamiento que, en sí, consiste en colocar una pieza de mano contra la superficie de la piel y la activación de la luz láser. Como muchos pacientes lo describen, cada pulso se siente como una salpicadura de grasa o el chasquido de una goma elástica sobre la piel.
2. Los tatuajes más pequeños requieren menos pulsos mientras que las de mayor tamaño requieren más. En cualquier caso, el tatuaje requiere varios tratamientos y múltiples visitas. En cada tratamiento, el tatuaje debe comenzar a ser progresivamente más ligero.
3. Inmediatamente después del tratamiento, se aplica una bolsa de hielo para calmar la zona tratada. A continuación, se pide al paciente que aplique una crema antibiótica tópica o pomada. Un vendaje o parche se utiliza para proteger el sitio, que igualmente debe estar cubiertos con algo que te tape del sol en exteriores.
4. La mayoría de los pacientes no requieren ningún tipo de anestesia. Sin embargo, dependiendo de la ubicación del tatuaje y el umbral de dolor para el paciente en particular, el médico puede optar por utilizar algún tipo de anestesia (que por lo general se trata de una crema anestesia tópica o inyecciones de analgésico en el sitio del procedimiento).

 

De modo que ya lo sabes, si deseas eliminar ese tatuaje y hacer “borrón y cuenta nueva”, no le tengas temor al láser que, dicho sea de paso, no dolerá más al salir de lo que puede haber llegado a doler el tatuaje en un primer momento (y ya sabemos que eso no es mucho).