Si son amantes del buen aroma dentro de su hogar y en las prendas que utilizan, seguramente tengan la tendencia a colocar aromatizadores en sus roperos y cajoneras.
Perfumar de esta manera la ropa que vestimos es una costumbre muy antigua, de hecho en otra época en que no existía el hoy tan conocido enjuague de ropa, la manera de perfumar la vestimenta era mediante la colocación de sacos de lino o tul en las que se colocaba un popurrí de flores secas. Las mismas emanaban el agradable aroma de esa mezcla en el lugar que las mismas fueran colocadas.
Hoy en día esta es una costumbre aún vigente entre algunas personas, y de hecho hasta se comercializan los popurrís de flores por parte de algunas empresas dedicadas al rubro de la perfumería.
Si desean perfumar su ropa con estas bolsitas de flores secas aquí les traigo una manera de prepararlas. Es una forma sencilla que sólo requiere como mayor cuidado el de esperar por la época de floración de las plantas.
Si están inspirados y desean preparar sus propios popurrís de flores tomen lápiz y papel y a tomar nota.
¿Qué necesito para el popurrí de flores?
- Flores
- Tul o tela de algodón
- Cintas de raso o alguna que la reemplace
- Hilo y aguja para coser
- Cordel
- Papel
En primer lugar debemos conseguir las flores, para esto debemos esperar al tiempo en que las plantas florecen, es decir la primavera. Debemos sacarle provecho a esta época ya que la mayoría de las plantas dan flores en esta estación. Asimismo, existen otros casos que dan flores en otra época del año, por lo que sólo debemos estar atentos e ir juntando las flores cuyo aroma nos agrade.
Luego de recolectarlas procederemos a secarlas, para esto debemos elegir uno de los métodos posibles. Podemos armar ramos y atarlos con un cordel, luego colgarlos en algún sector del hogar en el que estén resguardados de la excesiva humedad y preferentemente posean una entrada de luz y aire. Otra de las opciones es la de disponerlas sobre un papel y secarlas al sol, este método es más rápido, pero requiere de mayor cuidado y un espacio más amplio.
Una vez realizada la recolección de flores y posterior secado de las mismas, vamos a proceder a armar los sacos donde dispondremos las flores secas.
Para esto tomaremos el tul o la tela de algodón que hayamos adquirido. Si elegimos el algodón, la recomendación será que lo elijan entre los paños que presenten un tejido abierto para permitir que el perfume de las flores se disperse por entre los mismos.
Cortaremos la tela en rectángulos de aproximadamente 15 centímetros de largo por 20 centímetros de ancho. Doblaremos el rectángulo al medio y uniremos mediante una costura las partes laterales abiertas que le dan el largo y la parte inferior que le da el ancho, dejaremos el lado que le brinda el ancho en la parte superior abierto.
Luego de esto procederemos a rellenarlas con las flores. Debemos tomar los ramos y separar las flores de los tallos, ya que no los utilizaremos para armar el popurrí. Colocaremos las distintas flores en un recipiente y mezclaremos con cuidado. Llenaremos cada saco armado con una buena cantidad del popurrí, dejando un margen de unos 5 centímetros libres en la zona superior. Procederemos a cerrar los sacos atando con las cintas elegidas justo en donde se termina el relleno de los mismos.
De esta manera ya tendremos los sacos con popurrí para colocar en el interior de nuestros muebles y así perfumar nuestra ropa.
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