¡Qué tema el de las cucarachas! Son realmente desagradables y cuando llegan las épocas en donde abundan hay que estar cuidando de no dejar nada sobre la mesada o la mesa por miedo a que pasen por allí. La verdad es que a mucha gente le da asco y no es para menos. ¿Vemos qué podemos hacer con los venenos?
Uno de ellos se prepara con tan solo 3 tapas de cualquier frasco, como el de té o mermelada por ejemplo, 1 paquete de azúcar blanca y 200 grs. de ácido bórico que lo han de conseguir en cualquier farmacia. Una vez que han juntado estas tres cosas mezclan en cantidades iguales el acido bórico con el azúcar dentro de un frasco, luego sacuden con energía e irán vertiendo el contenido en las tres tapas que han reunido llenándolas hasta la mitad. No es necesario poner agua ni tampoco se debe hacer, porque entonces el ácido bórico no hará efecto. Finalmente, se ubican las tres tapas en los lugares estratégicos, es decir en aquellos en donde no sean visibles pero por donde pasen las cucarachas. Cuidado con las mascotas porque si comen de allí es peligroso, no morirán pero tendrán que acudir al veterinario.
¿Por qué este veneno hace efecto? Porque al comer el azúcar están comiendo al mismo tiempo el ácido bórico que las va quemando en su interior y en pocos días mueren. Por ello es que no van a morir de un día para el otro, habrá que esperar al menos una semana, pero finalmente se logrará erradicar a todas.
El motivo por el cual no hacen efecto los aerosoles típicos, es porque no debemos subestimar la inteligencia de las cucarachas. Una vez que lo huelen ya se van acostumbrando y por otro lado es uno de los insectos más resistentes y es por ello que en muchas casas hasta fumigan.
Otro veneno casero que les ha de servir siempre teniendo la casa limpia y sin juntar basura ni otro tipo de deshechos como cajas o bolsas, es el de preparar mezclando en un frasco nuevamente ácido bórico, pero esta vez con bicarbonato de sodio y también con azúcar. Si le pueden agregar yeso mucho mejor. La fécula de maíz en esta mezcla resultará muy beneficiosa. Así que como en el procedimiento anterior y de acuerdo a las superficies a proteger, realizarán una mezcla con partes iguales de cada ingrediente y las colocarán en tapas de plástico las cuales una vez más han de ubicar en los sitios en donde no vayan las mascotas, pero que las cucarachas no puedan sortear. Estas tapas las pueden ubicar en el patio o jardín también. Es una muy buena alternativa colocar las tapas en la zona de las cañerías, de las rejillas del patio, del baño y en los rincones y también en las alacenas puesto que las cucarachas se filtran por todas partes.
Según los especialistas estos insectos se esconden con suma frecuencia dentro de los muebles, cajones cajas, baño, aun en la bañera y cerca del aire acondicionado, ya sea para frío o para calor. Detrás de la heladera lo hacen siempre, así que allí pueden colocar otra tapa con la mezcla. Si tienen pisos de madera y sótanos, pongan allí también tapas porque son los sitios más habituales para que se escondan.
El laurel también sirve como veneno pero cuando no hay tantas, se cortan algunas ramas con hojas y se van colocando en todos los rincones de la casa. Si quieren pueden picar las hojas de laurel para que las coman más rápidamente.
Otra especie de veneno, es el ácido bórico pero mezclado con cebolla bien picada y añadiendo una taza de harina. De esta manera mezclan los ingredientes, y los vierten en las tapas a ubicar en los lugares más sospechosos.
La lavanda en bolsitas o bien la lavanda directamente picada, también se suele usar como el laurel porque debido a su exquisito aroma ahuyenta a este tipo de insectos. Cuando pasen dos tres días, comiencen a pasar con frecuencia la aspiradora aunque no tengan alfombras, para aspirar a las que ya hayan muerto y si hay algunas que están tambaleantes con un simple golpe ya la matan. También si está aun medio muerta, se le puede tirar un jarrito con agua hirviendo. Finalmente, cuando limpien los pisos, si no se han de dañar, háganlo con amoniaco para poder matarlas, e incluso coloquen amoniaco con agua en la pileta de la cocina y baño dejando correr el agua para que recorra las cañerías y así evitar que vuelvan.
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