Cómo educar a su hijo en temas económicos. El manejo del dinero de niños y adolescentes

Cómo educar a su hijo en temas económicos. Finanzas en familia.

 

Cuanto antes involucremos a los hijos en temas de economía hogareña, más fácilmente, ellos comprenderán cuál es el uso correcto de este recurso. No ocultar las boletas y exponer en algunos frascos etiquetados, la finalidad de los diferentes fondos, podría ayudar a incorporar gradualmente, útiles conceptos sobre administración. Permítale opinar sobre gastos y aproveche para enseñarle amablemente, cómo se distribuyen los ingresos.

Para que el niño o adolescente, acceda al dinero, jamás se lo obsequie. El dinero debe llegar a él, como parte de un intercambio por algo, bienes o servicios, esta será  la base de una economía justa. El pago proporcional por un servicio (cortar el pasto o sacar la basura toda la semana, etc.) le dará la oportunidad de hacer pequeñas pruebas de administración.

Un aspecto fundamental, es la forma en que el concepto de riqueza se integrará al desarrollo de su hijo. Si el niño es educado con la idea de que el dinero es difícil de conseguir, que la vida laboral debe ser sacrificada, seguramente el joven trabajará de esa manera y asumirá un difícil acceso a la retribución.

Somos nosotros quienes creamos en su niñez, un paradigma, decimos frases y mostramos ejemplos, que determinarán las futuras acciones del niño, en su juventud y adultez. Este paradigma puede ser tremendo para el desarrollo y proyección personal. Si cree que sólo se accede al dinero a través de un sacrificio, entonces, él buscará qué sacrificar. A veces será la vida familiar, otras veces la vocación y capacidades, o la dignidad y los derechos personales. El dinero así adquirido, tendrá una carga dolorosa y, por ende, una valoración exagerada, que lo transformará en un fin en sí mismo. Se olvidará que la verdadera razón por la que se trabaja, es para sustentar las bases materiales del bienestar.

El bienestar es mucho más que una cuenta bancaria, pero si la incluye, mucho mejor. El bienestar es estar en paz con quien uno es y con el entorno, sentirse satisfecho por los logros y con suficiente espacio y tiempo para nutrir afectos familiares y una vida social. El bienestar es continuar evolucionando como persona y ser parte positiva del mundo que habitamos.

El dinero es el medio por el cual podemos acceder a una parte del bienestar, la parte material, y si lo hacemos correctamente, también colaborará con la parte humana del estar bien.

Es importante que el joven valore al dinero como herramienta para conseguir objetivos superiores: ampliar sus conocimientos y acceder a un sano confort. Y es fundamental estimularlo para reflexionar acerca de lo que le gustaría hacer, teniendo en cuenta que estamos en una sociedad donde los jóvenes no consiguen  intereses que los movilicen.

Por último: enseñe a ser solidario y compartir, a no confundir acumulación y tacañería, con ahorro y administración.

Una frase para reflexionar: “se puede ser rico o pobre, feliz o infeliz”: si eres pobre y feliz está bien, pero si eres rico y feliz estará mejor. Si eres pobre e infeliz, siempre será peor que ser un rico infeliz. La riqueza no hace la felicidad, pero la pobreza agrega problemas.

Ser buenos administradores de nuestros recursos puede darnos cierta estabilidad y permitirnos avanzar. La posibilidad de ser felices depende de la forma de manjar nuestra vida, emociones, pensamientos y también, los bienes materiales.